El Departamento General de Irrigación se un organismo autárquico y autónomo, que se financia exclusivamente con el aporte de sus usuarios, y administra y gestiona el agua cruda de la que dispone Mendoza.
Marinelli, quien desde principios de año sabía que el gobernador Suarez lo postularía para su continuidad hizo hincapié en que durante su gestión hizo una inversión histórica en obras, bajó el gasto corriente y que mejoró la distribución del agua. .
En el Senado
El secretario Legislativo David Saez leyó la resolución del despacho de la Comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales e informó a los senadores que las postulantes no poseían impedimentos algunos para ocupar dichos cargos. Luego, el senador Marcelo Rubio, quien preside la comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales, brindó los detalles sobre el proceso que llevó a que las postulantes reciban el aval de la Cámara de Senadores para que ocupen los cargos para los que fueron propuestos.
La semana pasada se desarrolló, en el Auditorio ubicado en el edificio Margarita Malharro de Torres, la Audiencia Pública en la que se evaluó la designación de Sergio Marinelli, para que continúe en el cargo de Superintendente General de Irrigación por cinco años más.
El funcionario llegó a la cartera hídrica en 2017, luego de desempeñarse al frente de la Secretaría de Servicios Públicos. Será el primer Superintendente en obtener un nuevo mandato desde 1916, es decir, año en el que se sancionó la Constitución de Mendoza.
El pliego para la designación correspondiente fue tratado y aprobado en el recinto por la Cámara de Senadores, mediante voto secreto.
El informe de gestión de Sergio Marinelli
Antes de llegar a la instancia del Senado, Sergio Marinelli pasó por una audiencia pública en la que brindó un Informe de Gestión, allí dijo que “enfrentar los desafíos del cambio climático y la sequía ha sido una gran apuesta para mi gestión al frente del Departamento General de Irrigación. En este Informe quiero dar a conocer a la comunidad en general y a nuestros usuarios, en particular, acerca de un manejo mejorado del agua en términos de adaptación y mitigación, de la mano de un cambio cultural tan necesario como urgente sobre las técnicas de riego y el consumo del agua. Alcanzar una mayor eficiencia en todas las áreas, en especial en la distribución y manejo del agua, ha sido el principal objetivo en estos cinco años al frente del organismo”.
El Superintendente de Irrigación expresó como síntesis que sus líneas de acción fueron muy concretas, con modelos de gestión basados en la oferta, la demanda y lo ambiental del recurso hídrico, además de la creación de programas para la puesta en valor del agua, la modernización en la actuación del Estado y el acceso a la información pública, entre otros.
“A los fines de aumentar la disponibilidad de agua frente a las exigencias del cambio climático y la sequía en la que se encuentra la provincia, en éstos 5 años impulsamos y desarrollamos con recursos propios ambiciosos planes de obras e inversiones de capital que involucraron una inversión de más de $2.500 millones distribuidas en la totalidad de las cuencas provinciales”.
El Presupuesto de Irrigación se incrementó entre los años 2017 y 2022 un 440% de acuerdo al siguiente detalle (Ver cuadro), mientras la inflación acumulada registrada en el mismo período fue mayor, del 505%.
Sobre obras, el gasto corriente y el personal
Un detalle muy importante es que la distribución del gasto entre Gasto Corriente, Personal y Obras e Inversiones sufrió una modificación significativa: bajó la participación relativa de los dos primeros en el gasto total con respecto al tercero, priorizando la inversión en obras, adquisición de equipamiento y asistencia a Inspecciones de Cauce para la ejecución de obras o compra de equipamiento.
De esta manera puede observarse que la Partida Personal pasó de representar un 59% del total del gasto en el año 2017 a un 43% en este 2022, teniendo su pico más bajo en el 2021 con un 41%. Del mismo modo, el Gasto Corriente pasó de un 20% en 2017 a un 18% en 2021. Esto permitió aumentar los fondos para obras e inversiones, que pasaron de un 21% en el 2017 a un 42% en el 2021, mientras que para el 2022 se destina un 37%.
En esta línea, el año 2021 merece una mención especial. El Presupuesto del año pasado de Irrigación previó para la ejecución del Plan de Obras una partida original de $550 millones, es decir el 30% del total del presupuesto, alcanzando un valor porcentual superior a la media histórica destinado a este rubro. No obstante, la recaudación (que superó la estimada) y las economías logradas en el gasto corriente permitieron llevar este valor a un total cercano a los $800 millones, gracias a lo cual se pudo destinar un 40% del presupuesto anual a proyectos de inversión en obras como así también a la adquisición de máquinas y movilidades. El superávit de recaudación se destinó en forma total a la adquisición de equipamiento por más de $150 millones, que no estaban originalmente previstos en el presupuesto.
Fuente: Diario Uno