La viabilidad de la mayoría independentista en Cataluña se juega en Bruselas
La renuncia de Clara Ponsatí, Lluís Puig, Toni Comín y Meritxell Serret y su remplazo por quienes les siguen en las listas, es fundamental para que los soberanistas completen la mayoría parlamentaria de 70 diputados para formar gobierno.
Los cuatro ex consejeros catalanes que se encuentran junto al ex presidente Carles Puigdemont en Bruselas, y que fueron electos diputados en las elecciones del 21 de diciembre, negocian en los últimos días con sus partidos las condiciones para renunciar a sus bancas para facilitar la formación de un gobierno independentista.
Es que los cuatro legisladores electos, al igual que Puigdemont, serán detenidos si regresan a España por los cargos que les imputa la justicia a raíz del proceso unilateral independentista.
A los cinco dirigentes huidos a la capital belga, se suma la situación de otros tres diputados electos presos: el ex vicepresidente Oriol Junqueras (ERC), a quien hoy el Tribunal Supremo español le denegó la excarcelación, y Jordi Sánchez y Joaquim Forn, ambos de Junts per Catalunya, el partido de Puigdemont.
La mayoría absoluta de la cámara autonómica es de 68 escaños y, por tanto, los independentistas deben resolver la ausencia de estos ocho diputados para mantener su predominio.