Empate agridulce: Argentina sigue sin convencer, pero sumó en Uruguay
Por la 15ta fecha de Eliminatorias sudamericanas, el combinado que dirige Sampaoli, con Messi a la cabeza, igualó sin goles ante la Celeste de Suárez. Se esperaba más de la Selección.
Sin verse todavía el equipo ofensivo que pretende el entrenador Jorge Sampaoli, la Selección argentina igualó 0 a 0 ante Uruguay en el estadio Centenario de Montevideo y, disputadas quince fechas de las Eliminatorias sudamericanas, sigue en puestos de repechaje.
El visitante no supo durante gran parte del encuentro imponer condiciones para que se juegue al ritmo que más lo favorecía y, tal como ocurría en el ciclo de Edgardo Bauza, la ofensiva dependió demasiado de lo que pudiera generar Lionel Messi, que aún con apariciones esporádicas fue el mejor de la cancha.
Con este resultado, la Argentina alcanzó la línea de Chile, pero por diferencia de gol continúa en zona de repechaje, mientras que Uruguay sacó un punto con tan sólo mostrar orden para defenderse.
En los diez minutos iniciales del primer tiempo, Argentina logró tener la pelota, tuvo paciencia para hacerla circular y, por ende, manejó el trámite.
No obstante, Uruguay se repuso con mucha intensidad en la marca, le dividió el balón y el juego empezó hacerse más luchado, algo que favoreció al local.
Argentina fue demasiado Messi-dependiente en ofensiva y el astro del Barcelona sólo tuvo dos jugadas en las que generó peligro, cuando se tiró hacia atrás a posición de enganche.
En la primera, le colocó un pase filtrado a Di María, que en una buena posición, metió un mal centro que no pudo ser aprovechado.
En la segunda, Lionel partió como un doble cinco adelantado, se sacó un hombre de encima y luego de una pared con Paulo Dybala, remató e hizo lucir a Muslera.
Argentina no tuvo juego externo porque Marcos Acuña no gravitó por derecha y Di María, como suele ocurrir cuando se pone la camiseta de la Selección, falló en la terminación.
Con esta escenario, Mauro Icardi quedó muy aislado y el equipo no pudo aprovechar sus diagonales ya que no tuvo un socio que lo asistiera.
Del lado uruguayo, el libreto para tomar recaudos funcionó bien, pero careció de poder de fuego en ofensiva, a excepción de una jugada en la que hubo una doble tapada de Sergio Romero ante tiros del “Cebolla” Rodríguez y Edinson Cavani.
En el inicio del complemento, se vio lo mejor del equipo de Sampaoli, con Messi como eje de cada ataque, tirado atrás y con panorama para colocar alguna asistencia o encarar de frente al arco.
En los primeros quince minutos, “Leo” colocó un pase filtrado para Icardi, cuya definición fue fácilmente tapada por Muslera.
En una de las pocas apariciones que tuvo, Dybala generó una falta en tres cuartos de cancha y el tiro libre de Messi, terminó haciendo lucir al arquero uruguayo.
Consciente que no había podido aprovechar el ancho de la cancha por la derecha ya que Acuña se sintió incómodo con la pierna cambiada, Sampaoli colocó a Lautaro Acosta para que haga el carril, pero a excepción de un desborde, no gravitó.
Con un Uruguay demasiado retrasado, el entrenador intentó que Javier Pastore ingrese por Dybala para que Messi tuviera un socio, como fue el jugador del PSG en la Copa América de Chile 2015.
El “Flaco” tuvo algún destello de su calidad, pero lejos estuvo de desequilibrar y, encima, el tiempo que estuvo en cancha no coincidió con lo mejor de Messi.
Con el paso de los minutos y a medida que el partido estaba por terminar, Argentina se terminó conformando con un toque lateral que nunca fue profundo, al punto tal que el epílogo mostró a dos equipos que no tenían intenciones de lastimarse porque entendían que les servía el resultado.
La Selección jugará el martes próximo frente a Venezuela en el estadio Monumental, con la necesidad de sumar de a tres puntos para ver si puede quedar en zona de clasificación directa.