De esta manera, la próxima semana podría votarse en la Cámara de Diputados y convertirse en ley, ya que la coalición de Gobierno también cuenta con los números en ese recinto. Dependerá únicamente de lo que se defina en el órgano de Asuntos Constitucionales de la Cámara Baja el próximo lunes. En ese espacio, encabezado por el legislador oficialista Jorge Difonso volverá a someterse a votación el dictamen para que pueda avanzar hacia el debate legislativo.

En las próximas horas el presidente de la bancada oficialista en esa cámara, Andrés Lombardi, podrá pedir preferencia de despacho apenas el proyecto obtenga estado parlamentario. Eso podría acelerar aún más los términos y quedar definitivamente instalada como el nuevo marco para las elecciones mendocinas. Siempre recordando que sólo podría aplicarse en sufragios locales, desacoplados de la Nación.

El reglamento prevé un ahorro en la impresión de boletas que redunda en reducción del gasto político ya que es el Estado quien provee cada papel y asegura igualdad a la hora de recibir cantidades. Éste fue otro de los puntos que objetó el PJ, desde donde aseguraron que esa suma sería mínima y por eso aún no se dan a conocer cifras concretas.

Sesión caliente

No hubo punto de conflicto que no estuviera orientado al casillero de lista completa. A pesar de llevar semanas discutiendo lo mismo, no hubo forma de que primara el diálogo y llegaron hasta la Cámara con iguales o mayores disidencias que cuando comenzó el debate.

El punto más álgido lo protagonizaron Lucas Ilardo (PJ) y Diego Costarelli (UCR), cuando este último recordó los slogans de campaña del Frente de Todos y lo relacionó con los puntos que se discutían este martes: “Ellos decían que iban a lograr acuerdos gracias a sus amistades en el Gobierno Nacional. Hoy estamos debatiendo acuerdos; ¿Saben para qué usaron ellos a sus amigos en la Nación? Para entorpecer el avance de Mendoza. Son una máquina de impedir”, se despachó el senador.

Ilardo no tardó en responderle cuando tuvo la palabra: “Lo que acaba de hacer Costarelli no se hace. Es romper reglas y, encima, faltando a la verdad”, vociferó. “Tengo muchos defectos, pero tengo una virtud. No hay presidente que diga que alguna vez mentí o rompí los códigos de este lugar. Y no recuerdo que alguien haya roto los códigos como acaba de hacer el señor”, dijo.

Además, desde el frente mayoritario de la oposición marcaron que hubo errores en el texto original y apuntaron las culpas hacia su autor, el ministro de Gobierno Víctor Ibáñez, quien más tarde, en diálogo con este diario negó que tales desaciertos hubieran existido. Además, le recriminó a sus detractores no haber planteado en comisiones las dudas que llevaron este martes a la discusión parlamentaria.

“Hemos escuchado mucho a la oposición. Varios de los planteos que llevaron de la manera correcta fueron incorporados”, aseguró. “Me extraña que pregunten en el recinto y al momento de votar cuando han tenido semanas y semanas para trabajar en esto, para pedir datos y discutir ideas. Están clarísimos los beneficios de esto que estamos impulsando hoy”, cerró Ibáñez.

Ibáñez, autor e impulsor del proyecto, le respondió a la oposición al finalizar el debate.

Ibáñez, autor e impulsor del proyecto, le respondió a la oposición al finalizar el debate.

Qué dice el polémico artículo

El apartado número 3 de la ley es el que generó rispideces desde la llegada misma del proyecto a las comisiones. Son apenas tres líneas en las que se deposita la chance de votar al mismo tiempo a toda una fuerza política, y es en torno a ese breve párrafo que se desataron casi todas las peleas legislativas, tanto en la previa como en el encuentro que se desarrolló este martes en el recinto.

“Las columnas contendrán los casilleros que se indican a continuación en relación con los cargos electivos a sufragar”, reza en una de las páginas iniciales. “Un casillero en blanco junto con la leyenda ‘VOTO LISTA COMPLETA’ para que el elector marque con una cruz, tilde o símbolo similar, la opción electoral de su preferencia por candidatos provinciales y municipales, en su caso”.

Respecto a ese punto se pronunciaron en contra casi todas las fuerzas opositoras a pesar de valorar el resto de la norma. A esa disposición, la ley agrega también que debe haber un casillero con fondo blanco con el símbolo partidario de cada agrupación, más otros elementos, formas y nombres que completan las categorías.

Sólo ese inciso generó controversia. Los otros 24 artículos fueron aprobados sin mayores consideraciones, salvo por el peronismo, que decidió bajar el pulgar en términos generales al proyecto.

Fuente: Diario Uno